Carlos A. Govea
Un problema de años y sin ser solucionado es existente en todos los municipios dentro de sus corporaciones policiacas, pues en todas hay oficiales con un crítico problema de salud como es sobrepeso, derivándose de ahí enfermedades crónicas.
Aunque al iniciar el actual sexenio de Gobierno Estatal, como informó la Secretaría de Seguridad y Prevención Social, fue aplicada una evaluación a elementos de Policía Municipal y Estatal en toda la entidad de San Luis Potosí, detectando al menos en cada corporación local entre un 40 y 60% con oficiales obesos, otro 20% mayores de 60 años.
Por ese fenómeno de obesidad muchos oficiales fueron sometidos a más exámenes y pruebas dentro de las academias de Seguridad Pública en la capital potosina y en Ciudad Valles, pero como todos aprobaron las evaluaciones ya en sus respectivos municipios siguieron con el sedentarismo porque no aplican programas de activación física.
Para la sociedad no es funcional contar con policías sin rendimiento físico al agotarse al poco tiempo en caminar o correr cuando es necesario, ya que la mayor parte del día la pasan sentados dentro de las patrullas.