Daniela Ramírez
El panteón municipal de Rioverde, enfrenta un desafío importante: según Eduardo Rivera, inspector de panteones, le quedan aproximadamente cinco años de vida útil antes de alcanzar su capacidad máxima. Este problema se intensificó debido a la pandemia, que provocó que áreas destinadas para un año se ocuparan en solo un mes.
Para abordar este desafío, se han propuesto varios proyectos, como la colocación de nichos en el área de cenizas, construcción de gavetas aéreas y fosas triples subterráneas, estas iniciativas buscan garantizar que el panteón municipal siga siendo un lugar respetuoso y digno para los Rioverdenses.